El Buque Escuela Cuauhtémoc lanzó tres llamados de auxilio antes del impacto; NTSB indaga actuación del remolcador y trabaja con autoridades mexicanas.

La Junta Nacional para la Seguridad del Transporte (NTSB) de Estados Unidos confirmó que investiga las maniobras realizadas por el remolcador que acompañaba al Buque Escuela Cuauhtémoc en el momento en que este impactó contra el puente de Brooklyn, un accidente ocurrido el pasado sábado que dejó como saldo la muerte de dos marinos mexicanos y otras 20 personas lesionadas.
Durante una conferencia de prensa, autoridades de la NTSB presentaron una cronología de los hechos y señalaron que el remolcador solicitó apoyo de otros remolcadores tan solo 45 segundos antes del choque. El primer llamado de auxilio se registró a las 8:24 de la noche, seguido de otros dos intentos de contacto, hasta que finalmente, a las 8:24 con 45 segundos, se produjo el impacto. Tres minutos más tarde, a las 8:27, el buque logró detenerse por completo y, a las 8:30, arribaron elementos de la policía de Nueva York al sitio del siniestro.
Michael Graham, directivo de la NTSB, informó que se examinarán a fondo los procedimientos y protocolos que debieron haberse seguido durante la maniobra de navegación, con el fin de establecer responsabilidades y detectar posibles errores de coordinación o fallas técnicas.
El investigador principal del caso aseguró que el primer informe preliminar con hallazgos iniciales estará listo en un plazo de 30 días, mientras que la investigación completa podría tardar entre 12 y 24 meses. Sobre una posible falla en el sistema de propulsión del Buque Cuauhtémoc, aclaró que aún no se ha determinado si este factor tuvo un papel en el accidente.
Asimismo, indicó que se está colaborando estrechamente con el gobierno de México y que se contempla entrevistar tanto a la tripulación del buque mexicano como a la del remolcador involucrado. Esta colaboración busca esclarecer completamente los hechos y prevenir futuros incidentes de este tipo, en un contexto donde se resalta la necesidad de fortalecer la seguridad marítima en zonas de alto tránsito como el puerto de Nueva York.