Yamandú Orsi ha ganado la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Uruguay, marcando el regreso de la izquierda al poder. Con un fuerte mensaje de unidad y diálogo, Orsi se prepara para gobernar en un contexto de descontento económico global y expectativas de cambio.

Las elecciones en Uruguay se llevaron a cabo sin incidentes, resultando en la victoria del candidato izquierdista Yamandú Orsi en la segunda vuelta. Este triunfo marca el regreso al poder de la izquierda, que había gobernado el país entre 2005 y 2020.
Resultados Electorales
Yamandú Orsi, abanderado del Frente Amplio, obtuvo el 49.56% de los votos frente al 46.17% de su rival, Álvaro Delgado, con una participación cercana al 90% de los votantes. En su primer discurso tras el anuncio de los resultados, Orsi agradeció a todos los que apoyaron su campaña y destacó que “triunfa una vez más el país de la libertad, de la igualdad y también de la fraternidad”.
Mensaje de Unidad
Orsi enfatizó la importancia de construir un país mejor y convocó a todos los sectores de la sociedad a participar en el diálogo nacional. Afirmó:
“No hay futuro si le ponemos un muro a las ideas.”
El presidente saliente, Luis Lacalle Pou, felicitó a Orsi por su victoria, mientras que Delgado reconoció su derrota con un mensaje de respeto hacia el ganador.
Contexto Político
Uruguay se convierte en el último país en revertir el apoyo a un partido en el poder en un año electoral marcado por el descontento económico a nivel mundial. Orsi, de 57 años y heredero del histórico José ‘Pepe’ Mujica, confía en la fuerza del Frente Amplio para liderar un gobierno centrado en la redistribución de ingresos y el crecimiento económico.
Promesas de Gobierno
Orsi prometió incentivar sectores clave como la agropecuaria, la industria, el turismo y los pequeños negocios, adoptando un enfoque más amigable hacia los mercados. La enfermera Yeny Varone expresó su apoyo, afirmando que Orsi es el candidato ideal para construir un futuro mejor para sus hijos.
Desafíos para Delgado
Álvaro Delgado, veterinario de 55 años, trató de capitalizar la popularidad del presidente saliente y defendió la continuidad de su gestión. Su campaña se centró en una mayor apertura económica y reformas para un Estado más eficiente, en respuesta a la desaceleración provocada por la pandemia y una sequía histórica.
Reflexiones de Líderes
La campaña electoral estuvo marcada por una apatía inusual entre los votantes, aunque figuras prominentes como Mujica y Lacalle Pou jugaron un papel importante. Mujica, quien se recupera de un cáncer, destacó la estabilidad democrática de Uruguay y la importancia de preservar este legado para las futuras generaciones.
“Uruguay es un país pequeño pero se ha ganado un reconocimiento de ser estable, de tener una ciudadanía que respeta las formalidades institucionales,” expresó Mujica.