Bad Bunny deslumbra en su nueva campaña con Calvin Klein, donde posa en ropa interior y exhibe sus tatuajes en una sesión fotográfica que está causando furor en redes.

El fenómeno global Bad Bunny vuelve a captar la atención del público con una colaboración que ha encendido las redes sociales. El artista puertorriqueño es la imagen de la más reciente campaña de Calvin Klein, en la que posa con los nuevos Icon Cotton Stretch Boxer Briefs de la marca. La sesión, capturada por el reconocido fotógrafo Mario Sorrenti, fue compartida este lunes a través de Instagram, desatando una ola de reacciones.
Calvin Klein presentó la campaña con la frase “icónica desde todos los ángulos”, haciendo énfasis en la confianza y magnetismo del cantante. En las imágenes, Bad Bunny posa con boxers negros y blancos, permitiendo a sus seguidores apreciar de cerca algunos de sus tatuajes más representativos, como el caballo en su pecho, el número “1994” en referencia a su año de nacimiento, el icónico corazón triste de la portada de Un Verano Sin Ti y un conejo corriendo en su brazo.
En una de las fotografías, el intérprete de Baile Inolvidable aparece frente a un espejo de tres paneles, resaltando su físico desde diferentes perspectivas y reafirmando su estatus como uno de los artistas más influyentes del momento. Con esta colaboración, Bad Bunny demuestra nuevamente su versatilidad, no solo en la música, sino también en el mundo de la moda.
Sin embargo, esta impactante campaña es solo una parte de la intensa agenda del puertorriqueño. En los próximos meses, se prepara para una esperada residencia en San Juan, que se llevará a cabo en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot, conocido como «El Choli». Los conciertos están programados del 11 de julio al 14 de septiembre y servirán para promocionar su álbum Nadie Sabe Lo Que Va a Pasar Mañana, el cual alcanzó el primer lugar en el Billboard 200.
Con cada paso que da, Bad Bunny sigue consolidándose como un ícono global. Su capacidad para marcar tendencia en la moda y la música lo mantiene en la cima, y su sesión con Calvin Klein es una prueba más de su innegable influencia.