Una agente de la Policía de la Ciudad fue sancionada y puesta en situación pasiva tras ser detenida junto a la banda que asesinó a Lucas Díaz durante un intento de robo en Tortuguitas. La mujer continuará cobrando parte de su salario mientras se esclarece su situación judicial.

Una agente de la Policía de la Ciudad fue sancionada y puesta en situación pasiva tras ser detenida junto a la banda que asesinó a Lucas Díaz durante un intento de robo en Tortuguitas. La mujer continuará cobrando parte de su salario mientras se esclarece su situación judicial.
Paráfrasis extendida:
Las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires aplicaron una sanción a la agente de la Policía porteña que fue detenida por su presunta participación en la banda delictiva acusada del asesinato de Lucas Díaz, el joven de 21 años que murió tras ser baleado durante un intento de robo en la localidad bonaerense de Tortuguitas.
Según informaron fuentes oficiales, el Ministerio de Seguridad porteño dispuso que la mujer quede en situación pasiva, lo que implica que seguirá formando parte de la fuerza, pero sin cumplir funciones operativas mientras se resuelve su situación judicial. Además, se le retiraron el arma reglamentaria, el uniforme y la credencial, y solo percibirá entre el 30% y el 50% de su salario.
La agente prestaba servicio en la Comuna 4 de Villa Zavaleta, pero su relación con la banda se descubrió tras una serie de allanamientos realizados por la Policía Bonaerense en el marco de la investigación por el crimen de Lucas Díaz. Durante los operativos, se logró la detención de siete sospechosos, entre ellos la uniformada, quienes estarían implicados en el violento asalto ocurrido el pasado martes.
El ataque quedó registrado por cámaras de seguridad, donde se observa cómo Díaz caminaba junto a su pareja y su bebé cuando fue abordado por dos motochorros. El joven intentó resistirse, soltando el cochecito de su hijo para forcejear con uno de los ladrones, pero recibió un disparo en el tórax que le causó la muerte.
Las imágenes fueron clave para identificar a los sospechosos, lo que permitió a las autoridades avanzar con los allanamientos en el Gran Buenos Aires. En los procedimientos se secuestraron armas, municiones, celulares y parte de una moto similar a la utilizada en el crimen.
La causa está a cargo de la UFI N°22 de Malvinas Argentinas, que continúa con las diligencias para determinar el rol de cada uno de los detenidos en el hecho, mientras la agente policial permanece bajo investigación por su presunta vinculación con la banda.