Un motín en el Centro de Reinserción Social de Tabasco dejó al menos siete muertos, supuestamente provocado por un intento de fuga de un reo generador de violencia.

Un motín en el Centro de Reinserción Social del Estado de Tabasco (Creset) dejó un saldo trágico de al menos siete muertos. La revuelta se desencadenó cerca del mediodía y, según informes extraoficiales, se trató de un intento de fuga liderado por un reo considerado un «generador de violencia».
La Fiscalía General del Estado (FGET) ha iniciado una investigación sobre los hechos. Un equipo de fiscales, junto con elementos de la Policía Ministerial y peritos, se presentó en el centro penitenciario para verificar el estado de los fallecidos, ingresando solo una vez que la situación estuvo bajo control.
La Policía, apoyada por el Ejército y la Guardia Nacional (GN), llegó al lugar poco antes de las 12 horas, cuando se reportaron disparos en el interior del penal, según testimonios de familiares de los reclusos que se encontraban en las inmediaciones.
Este motín no es un incidente aislado; el 19 de diciembre del año pasado, otro amotinamiento en el mismo penal resultó en la muerte de siete personas. En esa ocasión, el conflicto surgió cuando dos reos intentaron impedir su traslado a otras cárceles del país.
La creciente violencia en los centros penitenciarios de México plantea serias preocupaciones sobre la seguridad y el control dentro de estas instituciones, así como sobre la necesidad de reformas en el sistema penitenciario. La comunidad espera respuestas claras y efectivas de las autoridades para evitar que estos incidentes se repitan en el futuro.