La tragedia en Axe Ceremonia deja indignación en el gremio fotoperiodístico; exigen justicia por la muerte de Berenice y Miguel.

La tragedia ocurrida el pasado sábado 5 de abril durante el festival Axe Ceremonia ha generado una ola de indignación entre fotoperiodistas, asistentes y público en general, quienes exigen claridad ante los hechos que cobraron la vida de dos jóvenes profesionales de la imagen. En medio de vientos fuertes que azotaron el Parque Bicentenario, una estructura metálica colapsó y cayó sobre los reporteros gráficos Berenice Giles y Miguel Hernández, quienes cubrían el evento como parte de sus labores.
El accidente sucedió alrededor de las 17:00 horas, en plena jornada del primer día del festival, que prometía ser una celebración de música y arte en la Ciudad de México. Sin embargo, la tragedia dejó en evidencia posibles fallas en la logística y medidas de seguridad del evento, generando cuestionamientos no solo sobre el manejo de estructuras durante condiciones climáticas adversas, sino también sobre la respuesta de los organizadores.
A raíz de lo ocurrido, la comunidad de periodistas visuales, así como múltiples colectivos culturales, han manifestado su descontento por el manejo de la información posterior al accidente. El domingo siguiente, decenas de personas se congregaron a las afueras del parque para rendir homenaje a los fallecidos y exigir justicia. Las consignas se enfocaron no solo en el dolor de la pérdida, sino en la exigencia de respuestas y en la denuncia de la aparente indiferencia institucional y organizativa.
El malestar creció aún más cuando comenzaron a circular en redes sociales varios comunicados de prensa emitidos por el festival Axe Ceremonia, el Parque Bicentenario y el fundador del evento, Diego Jiménez. Diversos periodistas acusaron que dichos comunicados carecen de contenido real y fueron elaborados sin sensibilidad, algunos incluso generados con herramientas de inteligencia artificial como ChatGPT o Gemini, lo que fue interpretado como una manera de evadir responsabilidades y lavar la imagen pública de las marcas involucradas.
“Diferentes comunicados, algunos hechos con ChatGPT/Gemini u otro redactor terrible, pero todos diciendo lo mismo: jabón y agua para lavarse las manos. Tirándose la bolita de unos a otros”, denunció un fotoperiodista que presenció los hechos y que compartió su sentir en entrevista con INFOBAE MÉXICO. En su opinión, las declaraciones oficiales han estado llenas de frases vacías, sin asumir una responsabilidad concreta por la muerte de sus compañeros.
El reclamo más fuerte gira en torno a la falta de acciones claras y justicia para Berenice y Miguel. Bajo el hashtag #JusticiaParaBereYMiguel, la comunidad exige que se esclarezcan los hechos, se castigue a los responsables y se garantice que tragedias como esta no vuelvan a repetirse. En palabras del mismo fotoperiodista: “Lo único que deseamos es que los responsables de esta negligencia paguen lo que hicieron, que se mejore toda la experiencia para todos los conciertos y festivales, que recordemos que existe algo llamado empatía. Algo que ha faltado en muchas personas”.
El reclamo también se extiende a los derechos del público general, de los artistas, del staff, vendedores y trabajadores que, al igual que los fallecidos, forman parte esencial de la experiencia en estos eventos y no deberían estar expuestos a riesgos por falta de protocolos adecuados.
“Nadie debe morir por cumplir sus sueños. Nadie debe morir por ver a su banda favorita. Nadie debe morir por un boleto o acreditación”, se lee en uno de los mensajes más compartidos en redes sociales, dejando claro que la exigencia por justicia y verdad no se limitará a comunicados sino a una movilización activa y permanente.