Un TikToker chino destapó el verdadero costo de fabricación de las famosas bolsas de lujo, mostrando cómo marcas como Hermes venden artículos a precios desmesurados, mientras que el costo real de producción es considerablemente más bajo.

En TikTok ha comenzado una nueva tendencia en la que varios influencers, especialmente de China, exponen los verdaderos costos de fabricación de productos de lujo vendidos en Estados Unidos, como los bolsos de marcas reconocidas mundialmente como Hermes, Louis Vuitton y Gucci. Estos artículos, aunque se venden a precios astronómicos en el mercado estadounidense, son fabricados en China, lo que ha generado controversia en medio de las tensiones comerciales entre ambos países.
La tendencia comenzó tras el anuncio del expresidente estadounidense Donald Trump sobre la implementación de aranceles del 125% a productos chinos, lo que motivó a algunos tiktokers y fabricantes chinos a revelar detalles sobre la fabricación de artículos de lujo. Uno de los casos más destacados fue el del influencer chino @senbags, quien compartió un video viral en el que revelaba cómo estas marcas de lujo fabrican sus productos en China antes de enviarlos a Francia o Italia, donde se cambian las etiquetas para que figuren como «Made in Italy» o «Made in France».
El video se volvió viral rápidamente, causando asombro entre los usuarios de las redes sociales, aunque fue eliminado poco después de su publicación. Sin embargo, muchos usuarios lograron guardar y compartir el contenido, lo que permitió que la información continuara circulando en otras plataformas.
El influencer, que también es fabricante de estos artículos de lujo, reveló que el costo de fabricación de una bolsa de lujo, como la famosa Birkin de Hermes, puede ser tan bajo como 1,400 dólares, unos 27 mil pesos mexicanos. Sin embargo, estos bolsos se venden en el mercado a precios que oscilan entre 20,000 y 35,000 dólares, lo que representa una ganancia exorbitante para las marcas.
Este tipo de revelaciones han puesto en evidencia las estrategias de precios que utilizan algunas marcas de lujo, mientras los consumidores se preguntan si realmente vale la pena pagar esos precios por productos cuyo costo de fabricación es tan bajo. El debate sobre el valor real de los productos de lujo ha ganado fuerza, especialmente en un contexto de creciente desconfianza hacia las grandes marcas.