En Seúl, un policía salvó a una jovencita que estaba a punto de caer del piso 20; el dramático rescate se hizo viral en redes sociales.

Un impactante video ha conmovido a millones de personas en redes sociales, luego de que se difundiera el momento exacto en el que un policía logra rescatar a una jovencita que colgaba del piso 20 de un edificio en Seúl, Corea del Sur. El hecho ocurrió el pasado 2 de mayo en el distrito de Yeoksam-dong, donde la joven, por razones aún no esclarecidas, terminó atrapada en el techo de un edificio alto, aferrándose con desesperación a la estructura.
Según reportes locales, fue gracias a la rápida reacción de los vecinos que llamaron a los servicios de emergencia que pudo evitarse una tragedia. La joven, visiblemente agotada y cada vez con menos fuerza en los brazos, parecía estar al borde del colapso físico cuando arribaron los rescatistas.
Un bombero y un policía subieron hasta el punto donde se encontraba la joven, intentando convencerla de que regresara a un lugar seguro. Sin embargo, al notar que sus fuerzas se debilitaban rápidamente, el policía se lanzó en un acto de valentía, tomándola con firmeza del brazo y del cabello, y logró subirla justo a tiempo, evitando así una caída fatal.
Hasta el momento, las autoridades no han revelado la identidad de la joven, quien fue trasladada de inmediato a un hospital, donde se le brinda atención médica y apoyo psicológico. Tampoco se ha confirmado si se trató de un intento de suicidio relacionado con bullying o si hubo otros factores detrás del incidente.
Este hecho ha reavivado la conversación sobre la salud mental en Corea del Sur, un país que lamentablemente registra una de las tasas de suicidio más altas entre los miembros de la OCDE. Las mujeres jóvenes se encuentran especialmente en riesgo, debido a las presiones sociales relacionadas con la imagen, el rendimiento académico y laboral, así como los exigentes estándares familiares que muchas veces las empujan a situaciones límite.
El heroísmo del policía ha sido ampliamente aplaudido, mientras que el caso ha abierto una vez más el debate sobre la urgente necesidad de fortalecer los apoyos psicológicos y sociales para la juventud surcoreana.