Un joven escaló el cráter del Popocatépetl para dejar una ofrenda, a pesar de los riesgos y la prohibición de acercarse al volcán. Su acción generó debate sobre la seguridad y las posibles sanciones.
Un joven residente de San Pedro Yancuitlalpan decidió escalar el cráter del Popocatépetl, un volcán activo de 5,426 metros de altura, con el propósito de dejar una ofrenda frutal como parte de las celebraciones de los «cumpleaños» del volcán. La hazaña, documentada en un video que se ha viralizado en redes sociales, muestra al joven expresando el intenso miedo que sintió durante la experiencia, exacerbado posiblemente por la falta de oxígeno a esa altitud.
El Popocatépetl, situado en la frontera entre Puebla, Morelos y el Estado de México, está bajo la estricta vigilancia de las autoridades estatales y federales debido a su actividad volcánica. El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) y el Consejo Nacional de Protección Civil (CNPC) mantienen un monitoreo constante del volcán y han establecido una radio de seguridad de 12 kilómetros alrededor del cráter, zona a la cual está prohibido el acceso.
A pesar de que estos organismos no pueden imponer multas directas, el Reglamento Interior de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana establece que cualquier violación del radio de exclusión puede ser reportada a las autoridades competentes para su sanción. Sin embargo, el reglamento no especifica el monto de las multas.
La acción del joven ha generado un debate sobre los riesgos de escalar el Popocatépetl y la efectividad de las medidas de seguridad. Las autoridades reiteran que acercarse al cráter es extremadamente peligroso debido a la posibilidad de explosiones repentinas, caída de material incandescente y emisiones de gases tóxicos.
