Incendios forestales en Madera son combatidos por más de 140 brigadistas, con atención prioritaria y acciones coordinadas entre los tres niveles de gobierno.
La emergencia provocada por los incendios forestales en el municipio de Madera, Chihuahua, ha movilizado a más de 140 brigadistas, quienes se encuentran trabajando de manera intensiva para frenar el avance del fuego. La atención de estos siniestros se ha convertido en una prioridad para las autoridades de los tres niveles de gobierno, quienes, junto con comunidades locales, están coordinando esfuerzos para enfrentar esta situación crítica.
El Equipo Regional de Manejo de Incidentes, encargado de coordinar la respuesta ante los incendios en Madera y Casas Grandes, detalló que en la localidad de La Norteña se han desplegado 50 personas, mientras que otros 90 brigadistas y personal de apoyo se encuentran operando en las cercanías de Las Varas. Este operativo incluye a elementos de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC), y de los gobiernos municipales, además de voluntarios y propietarios de predios cercanos.
Las labores están enfocadas no solo en la contención de las llamas, sino también en la protección de la población y sus bienes, tanto en áreas rurales como urbanas que podrían verse amenazadas por el fuego. El trabajo se realiza en condiciones complejas, ya que en algunas zonas el comportamiento del fuego ha sido catalogado como extremo, producto de los vientos constantes que alcanzan velocidades de entre 30 y 50 kilómetros por hora, complicando los esfuerzos de extinción.
Ante este panorama, se han desplegado tanto recursos terrestres como aéreos, que se emplean de manera estratégica cuando las condiciones lo permiten. La prioridad es garantizar la seguridad del personal y de los habitantes, mientras se busca mitigar el impacto de los incendios en el entorno natural y social.
Las autoridades han hecho un llamado a la población para mantenerse informada a través de canales oficiales y evitar la propagación de rumores o datos sin confirmar. Se reconoce también la participación activa de la sociedad civil y diversas instituciones que han aportado insumos y personal para reforzar las tareas de combate y prevención.
Los trabajos continúan de manera ininterrumpida, y se prevé que las instituciones sigan actualizando a la ciudadanía sobre el estado de los incendios y las acciones implementadas para proteger a las comunidades.
