Israel lanzó un ataque sin precedentes contra Irán, provocando una masiva represalia que ha dejado muertos, caos en Medio Oriente y una fuerte caída en los mercados internacionales.

La tensión en Medio Oriente alcanzó niveles críticos este viernes luego de que Israel lanzara una ofensiva militar sin precedentes contra Irán, dirigida principalmente a su infraestructura nuclear y líderes militares. El ataque, bautizado como “Operación León Naciente”, tuvo como blancos instalaciones clave como Natanz, así como científicos y mandos del programa de misiles balísticos iraní. En respuesta, Irán activó una represalia masiva a la que denominó “Promesa Verdadera 3”, disparando cientos de misiles balísticos de distintos tipos contra territorio israelí.
Entre las consecuencias más impactantes del primer ataque israelí está la muerte de figuras clave del aparato militar iraní, incluidos el general Hossein Salami, comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria, y el general de división Mohammad Bagheri, el más alto oficial de las fuerzas armadas del país. La respuesta iraní fue inmediata y contundente, con misiles alcanzando bases aéreas, centros militares y zonas urbanas de Israel, incluyendo Tel Aviv y Jerusalén.
La situación también generó un fuerte impacto económico global. El índice Dow Jones cayó más de 860 puntos, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq registraron descensos de 1.2 % y 1.4 %, respectivamente. El precio del petróleo tuvo uno de sus mayores aumentos en años, ante el temor de interrupciones masivas en el suministro energético a raíz del conflicto.
Mientras se escuchaban explosiones en ciudades israelíes, el exembajador de Israel en Estados Unidos, Michael Oren, confirmó que su edificio fue sacudido por los ataques y se refugió con su familia en una habitación segura. Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que “todo Israel está bajo fuego”, y que se han interceptado numerosos misiles, aunque algunos han causado daños materiales y heridos leves.
La agencia estatal iraní IRNA también informó que lograron derribar al menos dos aviones de combate israelíes en su espacio aéreo, aunque esta afirmación aún no ha sido verificada por fuentes independientes. A su vez, el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, advirtió que su país responderá “poderosamente” y que Israel “traerá ruina sobre sí mismo”.
En medio del estallido bélico, el expresidente estadounidense Donald Trump manifestó su respaldo total a Israel y advirtió a Irán que debe retomar el camino diplomático antes de que “no quede nada”. Sin embargo, se desconoce si las conversaciones nucleares previstas entre Irán y EE.UU. continuarán este fin de semana.
La magnitud de la escalada deja al mundo en vilo, mientras el conflicto amenaza con desencadenar una guerra de mayores proporciones, involucrando no solo a las potencias regionales, sino también a actores internacionales con intereses estratégicos en la zona.