Ubicado en la Sierra Tarahumara, el municipio de Madera es un destino ideal para Semana Santa, con impresionantes zonas arqueológicas, balnearios de aguas termales, miradores naturales y actividades ecoturísticas.

En el corazón de la majestuosa Sierra Tarahumara, el municipio de Madera se posiciona como uno de los destinos más atractivos para disfrutar durante las vacaciones de Semana Santa. Su riqueza natural, su fascinante historia arqueológica y la gran variedad de actividades al aire libre lo convierten en un lugar ideal para quienes buscan aventura, descanso y contacto con la naturaleza.
Situado en la región noroeste del estado de Chihuahua, a poco más de tres horas de la capital, Madera cuenta con una oferta turística diversa que incluye desde impresionantes paisajes hasta sitios de gran relevancia cultural. Entre sus principales atractivos se encuentran las zonas arqueológicas, siendo Cuarenta Casas una de las más emblemáticas. Este sitio, conformado por antiguas edificaciones de adobe colado que datan del siglo XIII, ofrece un vistazo al pasado de las comunidades que habitaron la región.
Otro de los tesoros históricos que resguarda Madera es la Cueva Grande, un asentamiento humano ancestral con estructuras de dos pisos en excelente estado de conservación. Esta zona, situada en lo profundo de la Sierra Tarahumara, permite a los visitantes adentrarse en la historia prehispánica de los habitantes originarios del lugar.
El conjunto arqueológico de Huápoca es otro de los puntos de interés imperdibles en Madera. Se trata de un grupo de edificaciones conocidas como Casas Acantilado, que incluyen cuatro unidades habitacionales distribuidas en tres cuevas: Nido del Águila, Cueva del Mirador y Cueva de la Serpiente. Además, la presencia de una Atalaya, que servía como torre de comunicación o vigilancia, da cuenta de la avanzada organización de las sociedades que habitaron la región.
Pero Madera no solo es historia, sino también naturaleza y aventura. Entre sus múltiples atractivos turísticos destacan el mirador La Chinaca, la Misión Tres Ojitos y la Presa Peñitas, lugares ideales para admirar el imponente paisaje de la Sierra Tarahumara. Además, quienes buscan experiencias más dinámicas pueden recorrer los puentes colgantes o relajarse en los balnearios de aguas termales de Sírupa y Huápoca.
El municipio también ofrece diversas opciones para los amantes del ecoturismo, con actividades como senderismo, campismo, pesca y la observación de aves. Un atractivo especial es el avistamiento de la cotorra serrana, una especie en peligro de extinción para la cual se ha habilitado un área especial que permite a los visitantes disfrutar de su belleza sin afectar su hábitat natural.
Con su combinación única de paisajes, historia y aventura, Madera se consolida como un destino excepcional para esta Semana Santa, ofreciendo a los viajeros una experiencia inolvidable en el corazón de Chihuahua.