La Comisión de Puntos Constitucionales aprobó con 29 votos a favor, seis en contra y dos abstenciones una reforma a los artículos 4 y 27 de la Constitución, que busca proteger el maíz nativo en México.
La Comisión de Puntos Constitucionales aprobó una reforma a los artículos 4 y 27 de la Constitución con el objetivo de proteger el maíz nativo en México, al prohibir el uso de semillas transgénicas y fomentar un modelo de cultivo basado en prácticas agroecológicas.
Con 29 votos a favor, seis en contra y dos abstenciones, el dictamen establece que el cultivo de maíz debe realizarse sin transgénicos, asegurando así la conservación de las 64 razas de maíz nativo que existen en el país. Además, se reconoce al maíz como un elemento clave de la identidad nacional, con un papel fundamental en la alimentación y cultura del país.
La iniciativa, presentada por el Ejecutivo Federal, ahora deberá ser analizada y votada en el Pleno de la Cámara de Diputados, donde se decidirá si la prohibición del maíz transgénico se incorpora a la Constitución.
En el debate, varios legisladores expresaron su respaldo a la reforma, destacando la importancia de fortalecer la soberanía alimentaria y proteger a los productores agrícolas. Subrayaron que México es el principal productor de maíz blanco en el mundo, por lo que su conservación es esencial para la seguridad alimentaria tanto a nivel nacional como internacional.
No obstante, hubo legisladores que manifestaron preocupaciones respecto a los efectos de la prohibición en la productividad del campo. Señalaron la necesidad de desarrollar estrategias para mejorar el rendimiento agrícola, incluyendo el uso eficiente del agua y la infraestructura de riego, para fortalecer la producción nacional sin depender de organismos genéticamente modificados.
El dictamen avanza ahora a la Mesa Directiva, donde será programado para su discusión en el Pleno, lo que representará un paso clave en el futuro del cultivo de maíz en México.