Chihuahua defiende el comercio con EU ante aranceles, apuesta por la transparencia con un portal de datos abiertos y fortalece lazos económicos con estados vecinos de Estados Unidos.

En un operativo conjunto, autoridades mexicanas detuvieron a Roland Alberto M. y/o Román Alberto M. R., un ciudadano estadounidense de 41 años, originario de Dallas, Texas, presuntamente implicado en el tráfico de armas de fuego hacia México. El arresto se llevó a cabo en la carretera Chihuahua-Cuauhtémoc, cerca de un motel llamado «Houston», y fue resultado de la coordinación entre la Fiscalía de Operaciones Estratégicas, la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano.
El detenido, considerado un objetivo prioritario para el Gobierno de Estados Unidos, intentó identificarse con una credencial falsa, pero las labores de inteligencia confirmaron su verdadera identidad. Posteriormente, fue trasladado bajo un fuerte dispositivo de seguridad al Puente Internacional Stanton, donde fue entregado a los Servicios de Alguaciles de Estados Unidos (US Marshals) a las 16:40 horas, tiempo local.
Vinculación con crímenes de alto impacto
Según las investigaciones, el detenido es señalado como uno de los principales proveedores de armas para organizaciones criminales en Chihuahua y otras regiones de México. Entre los casos más destacados en los que se le vincula están:
El suministro de armamento utilizado en el atentado contra el entonces Secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, en junio de 2020. La venta de armas empleadas en el homicidio de un agente del Instituto Nacional de Migración (INM) en 2022. El asesinato de dos agentes ministeriales en Chihuahua, relacionados con disputas entre grupos criminales.
Cooperación binacional y compromiso con la seguridad
La detención y entrega de este individuo refuerza la política de cooperación entre México y Estados Unidos en la lucha contra el tráfico de armas, drogas y personas, así como el desmantelamiento de estructuras delictivas transfronterizas. Además, este hecho responde al compromiso de las autoridades mexicanas por fortalecer la seguridad y restablecer la paz en Chihuahua, una entidad severamente afectada por la violencia vinculada al crimen organizado.