Las enchiladas coloniales de Chihuahua fueron elegidas por Taste Atlas como las mejores de México y el mundo, gracias a su sabor inigualable y su receta tradicional con pollo, chiles y queso.

Las enchiladas son un ícono de la gastronomía mexicana, pero hay unas en particular que han sido reconocidas por su sabor excepcional. Según Taste Atlas, la prestigiosa enciclopedia gastronómica que califica los mejores platillos del mundo, las enchiladas coloniales de Chihuahua han sido nombradas como las más ricas, no solo de México, sino de todo el planeta.
Este platillo tiene raíces en la cocina prehispánica, cuando las tortillas eran un alimento básico. Con la llegada de la colonización, la receta evolucionó al incorporar ingredientes como carnes, queso y diversas salsas que enriquecieron su sabor y variedad.
Las enchiladas, en su esencia, consisten en tortillas de maíz bañadas en salsas que les otorgan su característico sabor. Pueden estar rellenas de pollo, carne deshebrada, queso o incluso frijoles, y existen múltiples versiones con salsas rojas, verdes, suizas y hasta de mole.
Según Taste Atlas, la versión de Chihuahua destaca por su preparación única. Las enchiladas coloniales se elaboran con tortillas fritas rellenas de pollo deshebrado, bañadas en una salsa de chiles, ajo, cebolla y tomate. Luego, se doblan, se cubren con crema agria y queso rallado, y se hornean hasta que adquieren un tono dorado y una textura burbujeante. Se sirven tradicionalmente con frijoles rojos o negros como acompañamiento, lo que complementa su inconfundible sabor.
Este reconocimiento reafirma la riqueza culinaria de Chihuahua y de México, posicionando a su gastronomía como una de las más apreciadas a nivel internacional.