Plaza Merino: de horca pública a punto de encuentro en Chihuahua

La Plaza Merino, en el Centro Histórico de Chihuahua, fue en el siglo XVIII un sitio de ajusticiamientos públicos. Hoy, es un espacio de convivencia con un peculiar foco tonal.

En el corazón del Centro Histórico de Chihuahua se encuentra la Plaza Merino, un sitio que hoy es un punto de encuentro y esparcimiento para miles de personas. Sin embargo, pocos conocen el oscuro pasado que resguarda este lugar, pues en el siglo XVIII fue utilizado como escenario de ejecuciones públicas.

Su historia se remonta a 1709, cuando se fundó el Real de Minas de San Francisco de Cuéllar. En ese entonces, el sargento mayor Juan Antonio Trasviña y Retes destinó un terreno frente a su hogar para que funcionara como plaza pública. Con el paso de los años, el sitio recibió distintos nombres, como Plaza de Trasviña y Plazuela de los Uranga, en referencia a sus propietarios.

En 1785, el ayuntamiento de Chihuahua ordenó la construcción de una horca en la plaza, donde se llevaron a cabo ajusticiamientos de sentenciados a muerte. Durante años, este espacio se convirtió en un lugar clave para la aplicación de la justicia colonial, funcionando como un patíbulo público.

Para 1797, el comandante de las Provincias Internas, Pedro de Nava, permitió la instalación de un tianguis los días 1 y 15 de cada mes, una actividad que se mantuvo hasta 1810. Posteriormente, tras la Independencia de México, las propiedades colindantes fueron cedidas al ayuntamiento, lo que permitió la creación de un mercado conocido como Parián.

En 1873, la plaza adoptó su nombre actual en honor al coronel José Merino, quien había fallecido el año anterior en la Batalla de Tabalaopa mientras combatía a los rebeldes porfiristas. Desde entonces, el sitio ha seguido transformándose, convirtiéndose en un referente del centro de la ciudad.

Hoy en día, la Plaza Merino no solo es un espacio de convivencia, sino que también alberga un fenómeno acústico peculiar conocido como foco tonal, que atrae la curiosidad de quienes la visitan. No obstante, su historia como escenario de ejecuciones sigue siendo un dato poco conocido por la mayoría, recordando el contraste entre su pasado de temor y su presente como punto de encuentro en Chihuahua.

614  Chihuahua sin Filtros

X